El Secretario General de UGT, Cándido Méndez, ha animado a la población española a participar “democráticamente” en las movilizaciones del 19 de julio “en defensa del derecho a tener un futuro. Realizaremos más de 70 manifestaciones y concentraciones en todo el país contra la política de recortes del Gobierno, que afecta a la inmensa mayoría de la población y que puede provocar un salto hacia atrás, llevando a la población a unos niveles de renta del año 1975”.
Cándido Méndez ha realizado estas declaraciones en la rueda de prensa, junto con el Secretario General de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, y Luis Barriga, de la Asociación de Directores y Gerentes de Servicios Sociales, y Juan Ignacio Bartolomé, de Economistas frente a la crisis como representantes de la Plataforma Social en defensa del Estado de Bienestar y los Servicios Públicos, para analizar las medidas de recorte aprobadas por el Gobierno y presentar las movilizaciones del próximo 19 de julio.
En este sentido, Luis Barriga ha señalado que las medidas de recorte del Gobierno “suponen una torpeza económica de gran magnitud del Ejecutivo” y Juan Ignacio Bartolomé ha manifestado que estas medidas “tienen muchas limitaciones para reducir el déficit, porque aumentan la prima de riesgo, aumentan el desempleo y recrudecen aún más la crisis”.
En la rueda de prensa, Cándido Méndez ha anunciado que “estableceremos un calendario de movilizaciones que abarcará hasta finales de año y en el que no descartamos ninguna iniciativa que pone a nuestro alcance la Constitución, incluida la Huelga General”.
El presidente del Gobierno se debería someter a un nuevo debate de investidura
El Secretario General de UGT ha afirmado que en el presidente del Gobierno “se ha producido una transformación. Con su política de recortes, ha pasado de considerar las referencias del pueblo español a considerar las referencias de Berlín, por lo que debería someterse de nuevo a un debate de investidura y a una consulta del pueblo español, porque su programa no coincide ni en una coma con el que presentó en su momento”.
En este sentido, ha señalado que en el BOE del día de hoy “se impone una hoja de ruta para empobrecer aún más a la población española, para aumentar el paro y para agravar la situación económica. Ésta no es una hoja de ruta para salvar a España, sino para hundirla”.
“Está concebida para imponer un modelo ideológico determinado a la sociedad de nuestro país y para proteger a las grandes fortunas y a las grandes empresas”, ha considerado, “y no se protege ni a la economía real ni a las familias de nuestro país”.
Cándido Méndez ha rechazado “rotundamente la forma de decidir estos recortes. No hay ni la más remota voluntad para buscar el consenso en la salida de la crisis. Tampoco compartimos la presentación del paquete de medidas, ya que la imagen del Rey no se puede mezclar con la imagen del señor Rajoy en la presentación de unas medidas que provocan un debilitamiento de los derechos constitucionales y suponen una ruptura de equilibrios y valores constitucionales básicos”.
En cuanto al recorte en la prestación por desempleo, ha señalado que “provocará un deterioro de la situación de los trabajadores en paro de nuestro país. El argumento que se da es un argumento cínico y falaz, ya que se justifica para incentivar la búsqueda de empleo cuando no hay ningún tipo de empleo en estos momentos y cuando solo el 15% del total de los jóvenes desempleados en nuestro país cobra una prestación por desempleo”.
Se pone en “el punto de mira a los empleados públicos, presentándolos como portadores de privilegios” y respecto a la subida del IVA ha considerado que “resulta escandaloso hasta qué punto el Gobierno incurre en contradicciones flagrantes que se llevan a la práctica sin ningún tipo de rubor y con total impunidad, con una medida que provocará un deterioro de la situación de la ciudadanía y ahondará en la recesión”.
Además, en cuanto a la compensación de la rebaja de cotizaciones sociales en dos puntos para 2014, ha manifestado que “no generará expectativas de crear empleo. Es una medida inútil pero lesiva para el mantenimiento de la sostenibilidad del Sistema Público de Pensiones. Es un caramelo para la patronal española, que no se merece ninguno”.
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