Carmen, la madre de Raquel, ha informado hace semanas y por escrito a la dirección del centro de Alcobendas sus circunstancias familiares y el grave trastorno que va a ocasionar a hija este cambio de horario.
Cambio que va a impedir atender y cuidar de su hija cuando termina su horario escolar a las 17 horas, poder asistir a sus clases de inglés y pintura, que son sus actividades extraescolares, porque nadie de la familia va a poder recogerla y acompañarla hasta las 11 de la noche.
La falta de respuesta y el silencio de la Gerencia del centro Makro de Alcobendas indican que la decisión es definitiva e irreversible y que Carmen tendrá que, de no impedirse, cambiar su horario de trabajo con el perjuicio que va a ocasionar a Raquel.
Se da la extraña circunstancia que de los más de 100 trabajadores que tiene el centro Makro en Alcobendas, tan sólo a Carmen se le ha cambiado el horario. Un cambio que, a juicio de los representantes sindicales de UGT no está justificado y que tiene visos de constituir un caso de abuso de poder por parte del Gerente de este Centro.
Hay que decir que Raquel vive con su madre y sus abuelos pero que estos, de avanzada edad, no están en condiciones de cuidar y atender a la niña.
El abuelo porque su vista es deficiente y sus energías escasas y respecto a la abuela de Raquel, da la triste circunstancia que su madre, la bisabuela de la niña, de 94 años, es dependiente y su salud está muy deteriorada por lo que requiere los cuidados de mañana y tarde de su hija, la abuela de Raquel.
UGT se ha dirigido a la dirección de Makro España para que se rectifique y subsane este atropello, mientras los servicios jurídicos del Sindicato están preparando las bases de una demanda que será presentada en los próximos días.
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